Si bien es sabido que las empresas venden productos o servicios, es innegable que su principal activo son las personas que las conforman y el talento que tienen y que aportan a la organización.

Pero la gestión del talento en las organizaciones es una cuestión compleja, ya que no se trata solamente de saber captar y atraer a las personas con talento para ingresarlos a planilla y ya; sino que después queda hacer probablemente lo más complicado: desarrollar y potenciar ese talento.

Marca personal y empresa

Es común escuchar hoy día el poco desarrollo interno de la marca personal en las organizaciones. Estos dos conceptos pueden sonar opuestos, pero, por el contrario, son aliados muy importantes, pues la marca personal es una poderosa herramienta tanto para las personas como para las organizaciones.

Trabajar el Personal Branding en las empresas tiene un sin número de beneficios, pero el impacto principal radica en que las convierte en organizaciones más humanas, más cercanas, más reales. Es decir, las empresas pueden seguir preocupándose por sus estrategias de ventas y marketing, y centrarse en una comunicación impersonal con sus consumidores y clientes; sin embargo, nunca conseguirán la confianza, la credibilidad y el grado de compromiso que consiguen las marcas personales.

De hecho, las empresas más grandes y con una cultura de digitalización clara como Apple, Google o Ikea son muy conscientes del poder de la presencia social de sus empleados y de la importancia de sus marcas personales como canales de marketing y comunicación con un alcance orgánico enorme. Por eso, diversas organizaciones han establecido programas que forman a los empleados para que puedan mejorar su marca personal al mismo tiempo que apoyan la estrategia global de la empresa.

¿Cómo pueden hacerlo? A través de programas o planes que pongan en valor el talento de sus colaboradores, utilizando los 4 pilares del Personal Branding en las empresas. Estos son:

1.- Executive Branding permite poner en valor a los directivos, ya que sin la visibilidad interna y externa de los dirigentes es muy difícil generar un sentimiento de pertenencia en los colaboradores de la empresa.

2.- Social Selling consiste en emplear las herramientas sociales para poder identificar posibles clientes y crear relaciones duraderas con los clientes actuales. El departamento de ventas usa las redes para aportar valor a los consumidores, respondiendo a sus preguntas y comentarios y compartiendo contenidos de valor.

3.- Employee Advocacy permite generar el tan deseado engagement entre la marca con sus clientes, a través de la comunicación de los colaboradores, quienes se convierten en los reales influencers de la organización.

4.- Employer Branding es lo que comúnmente conocemos como "marca empleadora". Una forma de fidelizar el talento que tenemos dentro de la compañía y de optimizar la calidad de contratación, atrayendo al mejor talento del mercado.

Dicho esto, es importante y necesario que las organizaciones trabajen en impulsar la marca personal de todos sus empleados y logren convertirlos en embajadores de marca, más aún en estos tiempos pospandemia. Si lo consiguen, están adquiriendo una ventaja competitiva sostenible en forma de mayor alcance y visibilidad, al mismo tiempo que mejorarán la reputación de la marca, la satisfacción laboral y la retención de los colaboradores.

Sin lugar a duda, trabajando la marca personal de los colaboradores no sólo estarán gestionando adecuadamente el talento dentro de la organización, sino aportando un a la empresa un valor añadido y diferencial impresionante.

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