La siguiente lista incluye álbumes que considero fundamentales en la década de los 90, no sólo porque vendieron millones sino más bien porque sobresalen por su innovación, creatividad y calidad compositiva en letras y música, así como las sensaciones a través de los sonidos e interpretación.

Red Hot Chili Peppers - Blood sugar sex magik (1991)

Mezcla funk, rock y heavy. En  pleno reinado del rock pesado surgían dos nuevos héroes: en la guitarra John Frusciante y Flea en el bajo. El disco es increíble de principio a fin, con ritmos variados donde predominan temas sexuales. En “Suck my kiss” muestra la parte funk/rock con Anthony Kiedes rapeando (como en varias canciones). En esta misma línea está la genial “Give it away” que termina recogiendo riffs de heavy metal a lo Sabbath en el final. También la estupenda “Funky monks” es la canción más funk del disco. La genial y melancólica I could have lied apaciguan la secuencia. “Blood sugar sex magic” se convierte en la canción más pesada con dos partes marcadas en la voz. Y como cereza del pastel “Under the bridge”, que los catapultó a la fama y es la canción más conocida del disco.

Megadeth - Rust in peace (1990)

Dave Mustaine y Marti Friedman desarrollan muy buen trabajo de guitarras, un disco de trash metal bien elaborado, riffs prolongados, armonías a dos guitarras; todo hecho con gran técnica, velocidad y melodía. Inicia de forma épica con “Holy Wars”. En “The punishment due” suena una guitarra española; “Hangar 18” es una canción más melódica e intensa en los cambios de ritmo. En “Take no prisoners” convulsionan los cuatro músicos, sobre todo en el inicio. Otras piezas imprescindibles son “Five magics” y “Lucretia” (que empieza con una risa diabólica). En “Tornado of souls” destaca el solo de Friedman. La portada del disco es impactante y memorable, en ella aparece un alien dentro de una cápsula ante una audiencia de presidentes de varios países “del primer mundo” representados por la figura diabólica de Megadeth (Vic Rattlehead).

Pantera – Vulgar display of power (1992)

Álbum brutal y genial. La banda está enmarcada en el sub género Groove metal. La voz de Phil Anselmo actúa en contrapunto con los afilados riffs de Dimebag Darrel, siempre listo para la carnicería. Esta combinación es la marca registrada del álbum, tanto como la línea rítmica del bajista Rex y la batería con doble pedalera de Vinnie Paul. El disco inicia con “Mouth for war”, una moderada introducción de guitarra para dar paso a la increíble manera de cantar de Anselmo (algo nuevo hasta esa época), continúa la demolición con
“A new level y Walk”. El disco no baja las revoluciones, al contrario, aumenta con la rápida “Fuckin hostile”. El tema “This love” sólo te adormece al inicio para luego explotar intercaladamente. El disco termina con la genial “Hollow” que va en plan lento, con voz melódica, para luego endurecer en la mitad. Sin duda, un álbum que te dejará en shock.

Nirvana – Unplugged in New York (1993)

Sencillo, emotivo, rodeado de un aura amarga. Visualmente el escenario formaba parte del mensaje: cortinas púrpura, lámparas, velas, flores. La banda deja a un lado el sonido áspero y distorsionado de sus discos de estudio, además se presentan con dos nuevos acompañantes Lori Goldstone, en el cello, y Pat Smear que cubre a Cobain con la segunda guitarra. Los temas elegidos no son éxitos con excepción de “Come as you are”. Nirvana toca unos covers que convierte en históricos: Vaselines (“Jesus doesn’t want me for a sunbeam”), David Bowie (“The man who sold the world”), Meat Puppets (“Plateau, oh me, lake of fire”). Para finalizar, el cover de Led Belly, la mítica “Where did you sleep last night?”, en la cual se puede ver y oír a Kurt desgarrando su voz hasta quebrarse, dejando la vida y el alma en la interpretación, con una revelación en sus ojos. Es sin duda lo mejor del disco.

Smashing Pumpkins – Pisces Iscariot (1994)

Recopila demos, outtakes y lados b de singles, sin embargo, el álbum resulta muy interesante  entregado en gran parte a la balada acústica (por ratos sentimental), algunos temas pesados y desgarradores, con solos de guitarra psicodélicos y con una sobresaliente interpretación de Billy Corgan, líder, guitarrista y compositor principal. El tema “Soothe”, melancólica y acústica, inicia y marca el rumbo del disco. Como segunda canción la que pudo ser la primera de la lista: “Frail and bedazzled”,  genial y frenética para un pogo grunge, luego más suave y distorsionada “Plume”. Entre los covers destacan los de Fleetwood Mac y Animals: “Landslide” y “A girl named Sandoz”, la psicodélica “Starla” y sobre todo “Blue”, pesada al inicio y relajada e instrumental camino al final. Ni los Smashing hubieran esperado el resultado de este disco de descarte.

Foto: Portada de "Rust in peace" de Megadeth