La dirección regional de Cultura tiene nuevo director. El arquitecto y profesor universitario, Alberto Risco Vega, ha sido elegido por el gobierno para elevar culturalmente a Lambayeque en un momento en el que, a pesar de la falta de presupuesto para este sector y el caos de la región, se producen más eventos, aparecen más asociaciones artísticas y el público comienza a responder, asiste, espera más espacios. 

Lambayeque espera y necesita de un director que sepa articular a todos los colectivos, asociaciones y artistas para definir la mejor agenda cultural posible en la región. Debe promover eventos importantes y descentralizados, recuperar y defender el patrimonio, además de generar nuevas alternativas como centros culturales, galerías, ambientes para conciertos, etc. 

Al menos en la conferencia de prensa que convocó ayer para presentarse, el nuevo director reveló que sí está en sus planes realizar un foro anual con todos los colectivos y agentes culturales de la región (¿cuántos somos todos?, sería bueno saberlo); afianzar nuestra identidad, “generar vínculos entre todas las identidades de nuestra región: la andina, la costeña, la urbana”; promover que Chiclayo tenga un centro cultural equipado con lo necesario para albergar eventos de calidad;  continuar con el Festival Internacional de Cortos Fenaco; vincularse con otras direcciones de cultura como Cajamarca y La Libertad; entre otras acciones.

Una de sus propuestas para resaltar es la de generar alianzas sólidas con las universidades locales, de las cuales dijo que deberían comprometerse mucho más en el desarrollo cultural de la región. Y todos debemos estar completamente de acuerdo. Las universidades deben relacionarse entre ellas y con la dirección regional de Cultura. No deben pensar en que solo están compitiendo para atraer estudiantes, clientes en sí. No es lo ideal que contribuyan a la educación y a la cultura solo de forma independiente, sino que articuladamente contribuyan más al desarrollo.

Por otra parte, fue una sorpresa no ver en la conferencia a ciertos colectivos, artistas y agentes culturales que promueven interesantes acciones y eventos, quizás incrédulos de una efectiva gestión estatal, de que no se puedan sostener proyectos a largo plazo porque se cambia de director más veces que los presidentes de turno. Y con nuevo director, nuevo plan, nueva gente, nuevos proyectos, nuevos eventos, nuevos militantes del gobierno de turno pidiendo algún puestito. Así algunas de estas razones los desanimen, es necesario que ellos, y todos los que mueven el ambiente cultural lambayecano, se relacionen con la dirección regional de Cultura y presenten propuestas. Es una acción fundamental que el nuevo director debe promover en los próximos días.

Foto: DRC-Lambayeque