CULTURA

Smokin´: rock blues en Chiclayo

Altavoz   |   Claudia Fernández   |   Noviembre 14, 2014


Los integrantes de Smokin´, una joven banda con una sobresaliente fusión del blues rock, nos reciben en las instalaciones de Full Music. Braulio Mendoza (voz y guitarra), Paolo Paico (guitarra), Juan Alberto Chamaya (bajo), Andrés Cortez (tecladista) y Maluco Reyes (batería y percusión) nos cuentan un poco sobre su formación y sus proyecciones musicales.

¿Cómo se formó Smokin´?

Paolo: Los primeros que nos conocimos fuimos Braulio y yo. Estudiamos juntos en el mismo colegio y empezamos el proyecto ahí. Después, cuando teníamos un par de meses tocando, conocimos a Maluco (primo de Braulio) y que en esa época no eran muy cercanos, pero por la música se acercaron más. Y bueno, propiamente como Smokin´ en realidad nos formamos a finales del 2012, justo para el día que se iba a acabar el mundo. El 21 tocamos por primera vez con el nombre de Smokin´ en el restaurant Ochocalo. Ya son casi dos años que vamos juntos. Al inicio estaba como bajista Gonzalo Amaro, un amigo y luego ya entró Juan Alberto.

¿Dónde nace el nombre de Smokin´?

Paolo: El nombre de Smokin´ surge porque con Braulio comenzamos a pegarnos al blues clásico, Erick Clapton, Muddy Water, Albert King y llega un momento en el que empezamos a escuchar música más fuerte y Braulio empieza a escuchar otros artistas y entre ellos a la banda Humble Pie y Humble Pie tiene un álbum que se llama Smokin´. Ese álbum es considerado uno de los padres del hard rock y el blues rock de la historia, y contiene más o menos lo que nosotros quisiéramos hacer. O sea, lo que nosotros estamos buscando por sobre todas las cosas es sonar, por así decirlo, como es ese álbum, que es una mezcla de blues, de rock, de folk. Para nosotros es un álbum extraordinario, contiene muchas cosas muy buenas y es lo que nosotros más o menos estamos buscando.

¿Es como una meta?

Paolo: No es una meta, sino que es como una guía. 

¿Cómo componen? Hay uno que compone o todos participan…

Paolo: Básicamente los que componemos somos Braulio y yo, pero todos nosotros no creemos mucho en eso de que el compositor es tal o cual porque lo que va es la banda, y a veces cualquiera de nosotros ha tenido la idea de una canción y luego cuando la hemos llevado a la banda ha sonado muchísimo mejor de lo que pensábamos. O sea todos nos terminamos complementando, nosotros no queremos que sea “Maluco y sus amigos” o “Juan y sus amigos” o “Braulio y sus amigos”. O sea la idea no es esa ¿no? La idea es que todos contribuyamos, por ejemplo, al bajo —que es un instrumento que muy pocas veces la gente le da la debida importancia— siempre le damos un espacio para que Juan haga su solo, lo motivamos. Igual a Maluco. Queremos que se den cuenta que somos una banda, somos todos un conjunto.

¿Cuáles son sus principales influencias?

Maluco: Las influencias son variadas, escuchamos música bastante vieja, de los 60 o 70, como también escuchamos música noventera de bandas que son muy buenas. En lo personal pues mi banda más influyente es Led Zeppelin, no puedo estar un día sin escuchar Led Zeppelin, pero por ahí nos influenciamos de muchas bandas y eso es algo muy bueno porque si bien es cierto no todos tenemos las mismas influencias en común, coincidimos en algunas. Por ejemplo, Paolo es un poco más recatado, por así decirle. Él es bastante Beatles, música bien trabajada, bien elaborada. Braulio es un poco más rocker, Alberto se influencia mucho de la música ochentera, con esos riffs de guitarra alocados y bajos precisos.

¿Creen qué lo están dando todo como banda? ¿Cada uno cómo músico? ¿O en realidad aún no creen que sean una buena banda?

Braulio: En realidad confiamos en que tenemos la capacidad para hacer algo bueno, que hay por trabajar mucho es cierto, pero yo confío más en eso, la capacidad. Desde mi punto de vista yo estoy bastante contento de tocar con mi grupo, con Maluco, con Paolo y con Alberto también porque aportan mucho la verdad. Cuando propongo una canción termina sonando mejor de lo que esperaba, y no sé si todas las bandas tendrán la suerte de tener eso, pero yo confío mucho en lo que tenemos, creo que es bueno.

Y la relación entre ustedes cuando construyen una canción, ¿algunas veces llegan a enojarse? ¿Cómo es la relación entre todos?

Maluco: Pasa que tener una banda es como tener una flaca, una flaca Braulio, una flaca Paolo; entonces en una relación siempre hay discusiones, no necesariamente alterada, pero llega un momento en que (bueno, confieso de que por ahí yo soy el que me enojo) como que nos peleamos y les digo que están haciendo esto mal y que eso no es así…
 Braulio: Pero hemos aprendido de eso, antes si era como que un montón de tensión, se volvía un tanto más fuerte, no al punto de que “¡ya no queremos tocar!”, pero si era como que “ya, ya, ya, dejémoslo ahí por hoy”. Pero ahora ya no, hemos aprendido, nos conocemos, ya vamos tocando un buen tiempo, sabemos que es lo que tiene uno de bueno, de que pie cojea el otro. También musicalmente ya nos entendemos mejor, antes era como que yo tenía que decirles “esto tiene que ser así”. En este punto es como que yo toco algo y Maluco como que ya sabe que va. La verdad es bastante chévere, da ganas de seguir tocando así.

¿Consideran la música una carrera o solamente la viven como un pasatiempo?

Alberto: Creo que todo comenzó como un pasatiempo, pero ya con el tiempo pensamos en esto como una carrera porque no es solamente quedarse acá, sino también salir a otros lugares y demostrar lo que estamos haciendo, y ahora creo que ya lo estamos tomando más en serio.

¿Es complicado ser músico en Chiclayo?

Maluco: Complicado en cuanto a que el público al que apuntábamos es un tanto reducido. Los medios locales favorecen a otro tipo de géneros, pero esa es la única complicación porque luego hay locales y hay bares en los que les agrada el tipo de música que nosotros proponemos y pues vamos, tocamos, nos divertimos, no es que necesariamente pretendemos vivir de la música enteramente, sería lindo, sería genial, pero en estos tiempos a nadie le es fácil ¿no? Todos debemos tener un as bajo la manga, una profesión y alguna que otra cosa por ahí que nos aguante.

¿Han tenido ofertas para tocar fuera de Chiclayo?

Paolo: Sí, hemos podido ir a tocar a otro lado, pero hemos preferido por el momento esperar un poco y tener más experiencia, más cancha, más nivel y después ir a romperla. Bueno, con Braulio fui a tocar a Lima para un evento de mi hermana, pero fue un concierto muy pequeño. Estamos seguros de que las ofertas van a seguir llegando, sin creerse la gran cosa estamos seguros de que va a llegar otra oferta y de que vamos a estar más cancheros y lo vamos hacer mejor.

¿Qué falta para que graben un disco?

Braulio: Lo que falta básicamente, a parte de la inversión que siempre es necesaria, es terminar de cuadrar los temas. Lo mismo debe pasar en tu revista, no escribes una nota y la lanzan. No, la vuelves a leer, ves que esté bien, o sea, uno cuando quiere lanzar algo —aparte de que le guste a la gente— debe sentir que estás satisfecho con lo logrado. Entonces como mencionamos todavía estamos en ese proceso de terminar de definir muchas cosas. A veces tocamos la misma canción y le agregamos diferentes cosas, probamos diferentes acordes. Hemos grabado por ahí algunos ensayos, algunas sesiones en vivo y nos sirve también para darnos cuenta qué está fallando, lo que hacemos bien tratamos de mantenerlo y lo que está mal corregirlo. Básicamente creo que eso es lo que falta para poder lanzarlo.

¿Cuándo más o menos?

Braulio: Decirte una fecha sería mentirte, en realidad creo que nos vamos a dar cuenta cuando sintamos que ya estamos listos, espero que sea pronto, estamos trabajando en eso.

 

 
Puedes conocer más sobre la banda y seguir las actividades en su página de Facebook: https://www.facebook.com/smokinbluesrock?fref=ts
Foto: Olga Elizabeth Escurra


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