Política
El Estado capturado
Peruanitis, por Omar Benel | Omar Benel | Enero 25, 2012
En la ciencias sociales y polÃticas la figura del Estado capturado se da cuando grupos de poder capturan al aparato del Estado y lo convierten ya no en un representante de la nación, un representante de todos los peruanos en nuestro caso, sino en un agente que sirve a sus propios intereses.
En el caso de la lucha contra el narcotráfico hay fuertes indicios que indican una captura del Estado por parte de los intereses de Estados Unidos. Eso salió en evidencia cuando Ricardo Soberón quiso darle un manejo diferente a la polÃtica antidrogas del paÃs y fue expectorado de Devida después de una bien coordinada campaña de desprestigio. Medios como El Comercio y Perú 21 lo atacaron desde el primer dÃa. También salieron algunos ‘asalariados’ de la embajada estadounidense para echar más leña al fuego.
Soberón cometió el pecado de decir la verdad: que la polÃtica antidrogas de los últimos años habÃa fracasado y se debÃa cambiar a un nuevo modelo que no se centre tanto en la erradicación, algo que no debe parar.
Pero por qué centrarse en la erradicación tanto, es muy sencillo: para mandar un mensaje a la sociedad y al mundo que los campesinos son la raÃz del problema, cuando en verdad son sus vÃctimas. Si no existiera un gran consumo de cocaÃna no existirÃa una gran producción de hoja de coca.
Estados Unidos es el paÃs con más consumo de cocaÃna en el mundo. Nada más en 1999 casi 4 millones de estadounidenses habÃan consumido cocaÃna (actualmente se calcula en 6 millones). ¿Qué culpa tiene el campesino de que se consuma tanta cocaÃna en el mundo? Ninguna. Es simplemente vÃctima de la gran demanda mundial por este producto ilegal.
Es por eso que Estados Unidos y Europa son co-responsables en este problema y por lo tanto tienen que aportar para la solución. Sin embargo, esta ayuda además de ser pobre, viene condicionada. Para 2012, Estados Unidos ha destinado apenas 56 millones de dólares para la lucha contra el narcotráfico. ¿Es esa cantidad suficiente para acabar un negocio ilegal que mueve casi 800 mil millones de dólares al año? Como se dice en buen peruano, eso no alcanza ni para el té.
Ahora al frente de Devida han puesto a Carmen MasÃas, quien hasta hace poco era jefa de Cedro, que es como una suerte de gran centro de rehabilitación. Aquà lo que siembra dudas es que Cedro ha sido financiado en los últimos años nada menos que por USAID, la agencia de cooperación de Estados Unidos. Por lo tanto es claro que la señora MasÃas está condicionada por quienes le pagaban hasta hace muy poco.
Estados Unidos y su corillo peruano creen que el problema del narcotráfico tiene que ver con la producción cuando es un ping pong con el consumo. Digamos que si se deja de sembrar coca en Perú los traficantes se la van a ingeniar para sembrarla en Bolivia o en Colombia o en algún lugar de los Andes, y asà vamos a estar hasta el final de los dÃas porque mientras haya demanda va a ver oferta.
Además, una muestra de que las polÃticas mundiales han fracasado es porque el consumo en lugar de haber disminuido ha aumentado. ¿Eso es un éxito o un fracaso? Es un rotundo fracaso. ¿A quién beneficia en verdad el narcotráfico? ¿Es a los pobres campesinos o a los bancos que lavan el dinero que este negocio genera? ¿Han investigado a los que importan los insumos que se usan para fabricar la droga?
Si el Perú va a recibir ayuda de paÃses extranjeros igual tiene que ser quien imponga las polÃticas a realizar. Y si esto no se puede dar, entonces es mejor que el paÃs financie toda la estrategia para que de verdad sea un paÃs autónomo y soberano en esa materia.
Foto: cortesÃa de periodismoperu.com
Compartir en
Comentarios
Déjanos un comentario
Visita mas contenido
Da clic Aquí para que revise otras publicaciones sobre Política